14.9.14

Os presento a MiniEva

¿Cuánto hace que no te ries? No hablo de una sonrisilla o de medias sonrisas. ¡Ni siquera de una buena sonrisa! No, hablo de una risa de verdad, de las buenas. De esas que te impiden casi respirar y cuando acabas te duelen tanto las abdominales que decides que no necesitas ir al gimnasio ese dia.

Una de las características diferenciadoras del ser humano frente al resto de los animales es su capacidad para reír e ironizar. Y yo, íronica 100%, en una etapa de mi vida perdí esa fantástica cualidad que todos tenemos. Es verdad que a veces no hay motivos, que a veces las cosas que nos pasan dejan muy poco espacio para la risa, pero ¿acaso tenemos algo que perder si nos reímos un poco más?

A mi parecer, la clave del humor está en la sorpresa, la incongruencia y la ocurrencia de lo inesperado. El humor aparece cuando algo en nuestro entorno o en nosotros mismos, que pensamos o esperamos que fuera de una determinada manera, se nos presenta de otra forma inesperada, deformada o de manera absurda. Ahí radica la magia de todo esto ya que podemos reirnos de casi todo. Solo tenemos que estar dispuestos a romper nuestros propios esquemas y a permitir que los demás nos los rompan. Observar la vida desde otra perspectiva y dejarse llevar.

Así apareció miniEva. Ella me recuerda estas deformidades de mi vida que me hacen reir. Defiende con toda su alma la ironía y el humor como principales armas del ser humano para afrontar los problemas. Porque todo empezó así. Quería afrontar los mios y ahora no puedo vivir sin esa miniEva que se rie de la vida y de todo lo que le pasa.


Reconozco que no sé dibujar, mi intención no es ganar el primer premio de ningún concurso artístico, pero en todo caso sé lo suficiente como para poder expresar aquellas pequeñas anécdotas, ideas y ocurrencias que me pasan, que hacen que me sorprenda un poco de la vida y, lo importante, me hacen reir, reir de verdad.


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